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El Mercosur y la UE se reúnen en Bruselas pero no prevén avances en comercio de bienes

22.06.2017

Las lentas negociaciones entre el Mercosur y la Unión Europea (UE) continuarán entre el 3 y 7 de julio, en Bruselas, y desde el bloque sudamericano no creen que haya avances sustanciales en la postura de la contraparte, en lo que respecta a los bienes agrícolas.

Como se trata de uno de los ejes centrales de las conversaciones, la próxima reunión del Comité de Negociaciones Birregionales no reviste elevadas expectativas, según apuntaron fuentes del Mercosur a BAE Negocios. Por si fuera poco, la propiedad intelectual y normas sanitarias y fitosanitarias son los nuevos capítulos donde aparecieron complicaciones para alcanzar un acuerdo entre el Mercosur y la UE, debido a la diferencia sustancial entre las partes.

La Reunión Intersesional de negociaciones entre el Mercosur y la Unión Europea tuvo lugar en Buenos Aires del 30 de mayo al 2 de junio y no arrojó grandes novedades en ninguno de los capítulos. Los grupos de trabajo fueron el comercio de servicios, compras públicas, propiedad intelectual, medidas sanitarias y fitosanitarias, obstáculos técnicos al comercio, solución de controversias, y comercio y desarrollo sostenible.

Fuentes diplomáticas del Mercosur expresaron que "la pelota está del lado de la UE, y si no aceptan negociar los bienes más sensibles (carne vacuna, leche, etanol), el Mercosur no va a dar un paso". Asimismo, dijeron que "existe una sensibilidad importante en cuestiones de propiedad intelectual y normas sanitarias y fitosanitarias, que pasaron a ser diferencias a resolver en las negociaciones".

Desde el bloque indicaron que el Mercosur debe seguir trabajando en las cuestiones sanitarias, que resultan de difícil estandarización entre los miembros del bloque por la extensión y variedad del territorio de la producción agrícola. El eje central de la propiedad intelectual se tornó complejo, en lo que respecta a las exigencias de Bruselas sobre denominación de origen. Esto afecta particularmente a la Argentina donde se utilizan como genéricos muchas indicaciones geográficas que los europeos quieren resguardar como propias, en especial vinos y quesos.

Durante un foro sobre la Argentina y la Unión Europea (UE), realizado en Buenos Aires, el embajador de Francia, Pierre Guignard, alertó no sólo por la resistencia de los productores rurales franceses, sino sobre las dudas de la sociedad civil francesa en esta coyuntura.

"Estamos a favor del acuerdo. Pero hay dudas de cómo el sector agrícola francés va a reaccionar. Existe un riesgo, no del gobierno de Francia ni de los 28 estados" europeos, que "queremos un acuerdo ambicioso, balanceado y mutuamente beneficioso", aclaró Guignard.

Según el diplomático, al gobierno francés le preocupa que no haya acompañamiento de la sociedad civil, porque "no se puede llegar a un acuerdo sin la inclusión profunda de la sociedad civil. Las empresas, los sindicatos, las colectividades territoriales tienen que estar de acuerdo", advirtió. Y recordó que el futuro tratado deberá estar ratificado por los parlamentos de cada miembro de la Unión Europea y del Mercosur.

Junto con Francia, otros países como Polonia e Irlanda son muy resistentes a un acuerdo en el sector agrícola.