Para la organización el aumento del PBI será sostenido, pero menor al que pronosticó hace seis meses.
Argentina seguirá en la senda del crecimiento en 2017 y 2018, con aumentos del PBI del 2,5% y 3,1%, respectivamente, gracias a las reformas del Gobierno, pero con unas perspectivas rebajadas, según el informe publicado por la OCDE.
El documento de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico constató que la segunda mayor economía de la región salió de la recesión en la que había caído en 2015, pero ahora cuenta con unas proyecciones de crecimiento menores a las formuladas hace seis meses.
Entonces el club, formado por el grueso de los países más ricos y del que quiere formar parte Argentina, situaba la mejora de la economía argentina en 2017 en un 2,9%, frente al 2,5% difundido hoy, y el 3,4% en 2018, ante el 3,1% del presente informe.
Según la OCDE, la política monetaria argentina seguirá "restrictiva" para poder contener una alta inflación de dos dígitos.
El pasado abril, otro organismo internacional, el Fondo Monetario Internacional (FMI), situaba la inflación en Argentina en 2017 en el 25,2%.
El control del "insostenible" déficit, del 5,8% del PBI a finales de 2016, debe abordarse a través de una política fiscal "moderadamente" restrictiva.
El documento también constató el esfuerzo del gabinete de Mauricio Macri en "restaurar la posición de Argentina en el mercado global" con la retirada de las barreras comerciales levantadas por el anterior gobierno de Cristina de Kirchner.
"La inversión será una pieza clave del crecimiento, apoyado por una mayor inversión en infraestructura, una mejora del clima de negocios y un aumento de la entrada de capitales", señaló el documento.
Asimismo, "la retirada de las tasas a las exportaciones" es positiva para Argentina, en concreto para su agricultura.
De este modo, el sector exportador se beneficiará de una mejora en los socios comerciales argentinos, especialmente Brasil, la mayor economía de Sudamérica.
La OCDE consideró que el mercado de trabajo sigue como un freno a la economía argentina, por lo que conviene reformarlo para hacer crecer "la productividad" y los "ingresos".
"El desempleo aún afecta al 8 % de la población activa, pero el empleo ha comenzado a crecer al tiempo que la economía inició su recuperación", apuntó el informe, que recordó que la pobreza aún toca a un tercio de la población argentina.
Además, el organismo, con sede en París, juzgó necesario "una completa reforma impositiva" que reduzca "distorsiones" y promueva "ecuanimidad".
Pidió "mayores esfuerzos" para reducir la desigualdades en el acceso a una educación de calidad y para frenar el trabajo informal o "en negro".
Los riesgos que acechan al país podrían venir, según la OCDE, de una recesión de Brasil prolongada y de un aumento del proteccionismo.
